Una vez más la ciencia demuestra la efectividad de la marihuana medicinal en enfermedades menos comunes y conocidas, como es en este caso, el Síndrome de Tourette. Actualmente el tratamiento con Cannabis para este síndrome no está permitido en todo el territorio de los Estados Unidos, ¿Cuál es la razón de ello? ¿Podría ser el desconocimiento de la efectividad de la marihuana medicinal para el tratamiento de este síndrome?
El Síndrome de Tourette (ST) es un trastorno neurológico hereditario que se caracteriza por la aparición de tics, movimientos o vocalizaciones involuntarias, rápidas y repentinas que se producen repetidamente de la misma manera.
No existe ningún análisis de sangre o examen neurológico para detectar el ST, siendo el diagnóstico realizado principalmente mediante la observación de los síntomas.
Los síntomas más comunes son los tics motores junto con uno o más tics vocales en algún momento del transcurso de la enfermedad. La ocurrencia de los episodios puede variar según el paciente, llegando a tener un impacto negativo significativo en las actividades diarias de estos.
Según datos de Medical Marijuana Inc., el Síndrome de Tourette afecta a 1 de cada 360 niños (más común en varones) de edad comprendida entre 6 y 17 años, siendo el inicio de los síntomas generalmente entre los 5 y 10 años, pudiendo tener efectos negativos en el proceso de aprendizaje de los niños.
Referente a la prevalencia de la enfermedad, es de 3-5 por 10.000 pacientes. Este trastorno se asocia al trastorno obsesivo compulsivo y al trastorno por déficit de atención con o sin hiperactividad.
Según un informe de la Psicóloga Diana Vasermanas, socia y asesora de la Asociación Andaluza de Pacientes con Síndrome de Tourette y Trastornos Asociados (ASTTA), la poca difusión y el desconocimiento que existe en nuestra sociedad acerca del ST, traen aparejados con gran frecuencia demoras y errores diagnósticos, con el consiguiente impacto emocional sobre afectados y familiares, así como dificultades para instrumentar terapias y apoyos adecuados. Dice además que la mayor consecuencia de la desinformación son las frecuentes situaciones de burla, rechazo o incomprensión, generadas por la ignorancia y los prejuicios hacia los niños y jóvenes afectados por este síndrome.
Como muchas otras enfermedades crónicas, el síndrome de Tourette no tiene cura, pero sin embargo existen diferentes fármacos para aliviar posibles dolores causados por la enfermedad, los cuales funcionan bien alrededor de 50 a 70 por ciento de los casos.
Según una investigación realizada por la University of New South Wales (UNSW), publicada en el American Journal of Psychiatry, la estimulación cerebral profunda puede reducir los tics motores en un 48% y los fónicos en un 57%, pero siendo esta una cirugía del cerebro, existen ciertos riesgos.
Diversos estudios realizados por la National Center for Biotechnology Information en 2002 y 2003, han demostrado la efectividad del uso del Cannabis en la disminución de tics asociados con el síndrome. Diversas pruebas, un mismo resultado.
Cabe destacar que a diferencia de la cirugía cerebral, el tratamiento con marihuana medicinal no presenta riesgos adversos. Dado que la gran mayoría de los pacientes son niños, una manera de beneficiarse de la marihuana medicinal sin tener que lidiar con los efectos psicotrópicos de esta planta, podría ser el uso de productos a base de Cannabidiol (CBD), el principal compuesto no psicotrópico del Cannabis. Se recomienda consultar a un especialista antes de probar cualquier tratamiento.
Adrian Kempiak
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